lunes, 12 de julio de 2010
Algo mas sobre el servicio eléctrico.
Recuperar Planta Centro no solucionará crisis porque ya cumplió su ciclo de vidaMarlene Castellanos* / Notitarde (Venezuela) - 16/05/10
Miguel José Lara: Los recursos que fueron utilizados para la compra de armas a Rusia podrían haberse invertido en los 7 mil megavatios que necesita el país para salir de la actual situación eléctrica.Laurentzi Odriozola, director de este diario; María Inés Ferrero, gerente de Relaciones Institucionales; Margarita Jiménez Márquez, representante de la Junta Directiva del rotativo; Miguel José Lara; Glenda González; Marlene Castellanos y Alejandrina Uribe-Betancourt, editora jefa diurna.
Las constantes fallas en el complejo de generación de energía de Planta Centro, y la suspensión de sus operaciones por daños sufridos en sus unidades, hacen pensar al ex director del Centro Nacional de Gestión del Sistema Eléctrico Nacional, Miguel José Lara, que seguir invirtiendo recursos en esta termoeléctrica no es una solución. Lara señaló que el nivel de deterioro de la infraestructura es de tal magnitud que recuperarla sería invertir dinero que no se justifica. "Si se hace, no sería lo más recomendable para el sistema eléctrico". Planta Centro no está aportando actualmente ni siquiera el 50% de su potencial, pues esta infraestructura generaba antes 2 mil megavatios para el servicio energético del país, y ahora sólo 460. Esta termoeléctrica, según Lara, recibió durante los últimos 10 años más de 200 millones de dólares asignados por presupuesto, recursos que no se ven, pues actualmente hay menos unidades en servicio. Igualmente comentó que la quema del transformador develó que existe una problemática grave dentro de las instalaciones, pues no se contó con una fase de repuesto en el sitio, que permitiera en menos de 24 horas reponer el servicio. Lara, quien estuvo en el Desayuno en la Redacción para comentar del informe sobre "La crisis eléctrica, una tragedia que une a los venezolanos", dijo a Laurentzi Odriozola, director de este diario; Margarita Jiménez Márquez, representante de la Junta Directiva del rotativo; María Inés Ferrero, gerente de Relaciones Institucionales; Alejandrina Uribe-Betancourt, editora jefa diurna, y a quien escribe estas líneas, que las calderas de Planta Centro no sirven y además no cuentan con la capacidad suficiente para el generador. El experto recomendó al Gobierno edificar una instalación nueva y más eficiente con todos los equipos, porque los que existen en la termoeléctrica ya cumplieron su vida útil. "Con una buena gerencia este proceso se llevará entre dos y tres años, siempre y cuando se consigan las turbinas con disposición inmediata". Lara dijo no entender por qué el Gobierno insiste en recuperar Planta Centro con la asesoría de los cubanos. "Esta decisión genera suspicacia, pues podría pensarse que hay una desviación de recursos, porque de las cinco turbinas, sólo funciona parcialmente la 4 y actualmente una tercera (la 1) está en recuperación, como ha registrado la prensa".
El país necesita 7 mil megavatios
-Venezuela requiere 7 mil megavatios. Si calculamos cada uno en 700 mil dólares, con los 5 mil millones de dólares que utilizará el Gobierno para comprar las armas a Rusia, se pudo haber generado la cantidad de megavatios que se necesitan. Esta cifra permitiría resolver el problema de generación eléctrica del país y algunas obras. Hasta el día de hoy sigue existiendo un déficit para suplir la demanda, el sistema nacional cubre desde finales de los años 80 más del 97% de toda la población. Para finales de 2009, la generación está compuesta por un parque hidráulico que tiene una capacidad instalada de 14 mil 630 megavatios y un parque térmico con una capacidad instalada de 9 mil 40 megavatios aproximadamente. Todo, para un total de unos 23 mil 670 megavatios. Venezuela cierra el año pasado con un consumo de energía de 123.000 gigavatios/hora y una demanda máxima histórica de 17.300 megavatios. Los planificadores estiman un incremento de dicho consumo con un promedio ínteranual de 4,25% en los últimos 10 años. La actual administración, que lleva ya 11 años, ha debido planificar para tener una generación superior al 55% de la identificada en 1998. Sabemos que en cuestión de días el embalse comenzará a recuperarse, pero así inicien las lluvias no se podrá restablecer el servicio en su totalidad.Es bueno explicar que, como todos los años a mediados de mayo, los aportes del río Caroní suben, pero lo recomendable en estos momentos es que se mantengan los cortes programados un tiempo más, mientras que el Guri se restablece. Suspender el racionamiento le corresponderá al Gobierno, pero sabemos que el escenario lo determinarán los próximos cuatro meses que vienen; fue por ello que el ministro Alí Rodríguez Araque habló de seis meses, pero el Presidente de la República dijo que el decreto de emergencia se extendería sólo por 60 días. Expertos señalan que debemos sacar del sistema una demanda cercana a los 1.600 megavatios/hora promedio, para evitar un mal mayor y una situación de crisis nacional.
¿Cómo hacer?
-Allí está el dilema, al corto plazo lo correcto es hablar de que los racionamientos se incrementarán y que se harán más frecuentes. La población estará más restringida de usar este servicio público que nunca antes. Es irresponsable señalar fechas precisas del colapso del sistema hidroeléctrico de Guayana, al menos hasta este momento. Pero sí se puede afirmar que a partir de mayo la situación del sistema hidroeléctrico de Bajo Caroní estará muy comprometida. El Guri en 2009 se deterioró casi como si se hubiese presentado dos años secos seguidos, porque se hizo un uso intensivo y se gastó mucha más agua de la que correspondía para un primer ciclo. Tenemos una situación desde el punto de vista del manejo de la represa que hace prever para 2011 un año crítico, si no se mantienen las medidas aplicadas hasta ahora, porque se deteriorará más el embalse podría llegar a la denominada cota crítica de 240. El Guri tiene 20 turbinas que fueron construidas en tres etapas: 1968 a 1976; después de allí se incorporaron equipos de 670 megavatios. Aun cuando el Gobierno reporta una capacidad instalada cercana a los 24 mil megavatios, está ofreciendo sólo 16 mil 500. Esto significa que el embalse no se recuperará este año porque hay un déficit de 8 mil gigavatios hora. Nosotros dijimos el año pasado que en 2010 no llegaríamos a la cota de colapso, pero advertimos que en 2011 se iban a presentar dificultades, si no se tomaban las previsiones del caso. Ahora bien, el sistema hidroeléctrico nacional representa una de las obras de ingeniería más imponentes del continente. Las represas de Guri I y II (8.850 megavatios), Macagua I, II y III (2.930 megavatios) y Caruachi (2.196 megavatios) representan una generación eléctrica de aproximadamente 14.000 megavatios, un 80% de lo que demanda el país en condiciones normales. A este sistema se le sumará en 2014 la central Tocoma, ubicada entre Guri y Caruachi, con 2.270 megavatios. La generación hidroeléctrica en el Bajo Caroní nos significa un volumen de energía en el orden de 550 mil barriles equivalentes de petróleo diarios, energía fósil (gas, diesel, residuales) que por defecto no quemaríamos en centrales termoeléctricas. Las otras fuentes de energía hidroeléctrica son: Central San Agatón, en Táchira (300 megavatios), Central José Antonio Páez, en Mérida (240 megavatios), Central Juan Antonio Rodríguez, en Barinas (80 megavatios), y Central Masparro, ubicada también en Barinas (25 megavatios). Próximamente, se pondrá en servicio La Vueltosa, ahora llamada Fabricio Ojeda, en Táchira (514 megavatios).
¿Se redujo el consumo con las medidas aplicadas?
-El aporte más importante se dio con el racionamiento a las industrias básicas, pues la demanda de Edelca se redujo casi en un 30%. Las acciones de Cadafe no fueron efectivas porque las cifras demuestran que no hubo una disminución. La explicación es que no posee medidores, por lo que no se pudo hacer un seguimiento. Esta última empresa tiene un déficit de medición que excede del 70% de los usuarios; esto hace que se determine que el resto de las acciones aplicadas por el Ejecutivo no fueron efectivas. Las asesorías que hemos tenido hasta el momento no han solventado el problema eléctrico; el país lo que requiere son obras. Nadie sabe dónde están los 50 mil millones de dólares que recibió el Ejecutivo a través de las asignaciones presupuestarias por la Asamblea Nacional, tarifas, ventas reportadas, Fonden y Rusia. El Gobierno dijo que iba a instalar 5 mil 800 megavatios, pero esta cifra ha entrado en su lista de deseos, porque su intención de concretar obras es escasa. Además hay mucha militarización y estos efectivos no están capacitados para esta área. En las plantas se han ido sustituyendo los ingenieros formados por personas que son afectas al proceso del Gobierno, las cuales son colocadas allí sólo para vigilar.
¿Qué no hizo el Gobierno?
-El Gobierno Nacional durante estos últimos 11 años no ejecutó obras que incrementaran la generación eléctrica a un promedio ínteranual de 1.200 megavatios. Además no inició la construcción de la planta eléctrica Termo Bachaquero (1.000 MW), ubicada en la costa oriental del lago, estado Zulia, la cual debió estar lista en 2008. El Gobierno instaló la planta Pedro Camejo, en Valencia, pero produce sólo 150 megavatios, el 50% de su capacidad (300 megavatios), por razones de combustible y transmisión asociada. La planta termoeléctrica Josefa Camejo, en Punto Fijo, de 450 megavatios, sólo opera una tercera parte de su capacidad. La presa de Tocoma, en el estado Bolívar, tiene siete años de retraso y se planteó que esté terminada en 2014. Igualmente están retardadas la presa La Vueltosa, en Mérida, y la de Masparro, en el estado Barinas. El Gobierno tampoco recuperó el parque turbo gas que administraba Cadafe, bajo el ensayo institucional hoy denominado Corpoelec. Otra realidad grave y ventilada es que durante estos 11 años no se han construido ampliaciones significativas de la red troncal. Lo que sí se puede afirmar con absoluta seguridad es que en estos 7 últimos años no se ha edificado ni un solo kilómetro de la red troncal. Este sistema funciona actualmente por encima de sus límites normales de operación. Corpoelec ha construido sólo 155 kilómetros de líneas de transmisión, cuando debió haber culminado 642 kilómetros, según sus propios informes. Cadafe perdió cerca del 75% de su electricidad por robos en baja tensión, mala facturación y por no cobrar. La demanda nacional se incrementó cerca del 60%. Eso representa unos 6.500 megavatios nuevos, pero sólo se pusieron en servicio 4.000 megavatios que no están operativos en su totalidad. Lo que sí se puede afirmar categórica y responsablemente es que a la administración del presidente Chávez nunca le han faltado piso legal, político y dinero para haber adecuado apropiadamente la infraestructura del sector eléctrico. Lo único que le ha faltado son ganas para trabajar y tener las obras funcionando debidamente. El Ejecutivo culminó Caruachi, la cual se encontraba en un 25% adelantada; la OAM, en el Distrito Capital (82% avanzada); la Josefa Camejo, Pedro Camejo, Argimiro Gabaldón, Termo Zulia I y la primera etapa de Termo Zulia II; además también concluyó Termo Barrancas, Masparro. En su mayoría, los proyectos ejecutados exhiben características deficitarias.
¿Cómo era el Centro Nacional de Gestión del Sistema Eléctrico?
-Cuando estuve allí, nosotros hacíamos planes que tenían un alcance de 20 años y se le entregaban los estudios al Gobierno. El documento establecía los requerimientos de la demanda y cuáles eran las obras que se requerían. Pero el Ejecutivo cambió la metodología y dijo que iba a impulsar la orimulsión. Posteriormente nombró una comisión de alto nivel para evaluar el sistema y se planteó que por nada en el mundo se iba a aplicar un racionamiento. En 1999 el Gobierno aceptó que iba a rehabilitar Planta Centro, un parque de turbo gas de Cadafe. En esa fecha Pdvsa asumió las labores de hacer la expansión del sistema eléctrico. La Electricidad de Caracas ya tenía una licitación para una planta que se llama El Sitio, que tenía un ciclo combinado. En 2001 se presentó el primer año seco y el Ejecutivo se planteó que en 2013 debería haber 41 mil gigavatios hora, pero nada de esto lo tenemos hoy día. Existen los respectivos informes, presentaciones y correspondencias, dirigidos directamente a la Vicepresidencia de la República y a los ministros de Cordiplan, de Energía y Minas en 2001, 2002 y 2003, en los cuales se señalan los correspondientes pronósticos. Posteriormente el Ejecutivo en el año 2005 formula el Plan de Desarrollo del Sector Eléctrico Nacional (Pdsen), que precisa muy claramente los alcances y características de las inversiones y obras a realizar, pero se ejecuta en un porcentaje muy bajo. Complementariamente, en el marco de la primera Ley Habilitante otorgada al presidente Hugo Chávez en 1999, se aprueba la primera Ley de Servicio Eléctrico en 110 años de la industria eléctrica en Venezuela, que de haberse cumplido no estaríamos en la actual coyuntura.
¿Es verdad que la culpa es de El Niño?
-El fenómeno de El Niño ha ocurrido 24 veces en toda la historia de registros de aportes del Caroní, la cual se lleva desde 1950. En los 11 años de esta administración, se ha presentado cuatro veces (2002, 2004, 2006 y 2009) y en las tres primeras oportunidades el Caroní entregó aportes al embalse del Guri superiores al promedio histórico. Incluso, en los años 82-83 y 97-98 su presencia fue más extrema que en la actualidad, y no tuvimos necesidad de padecer lo que actualmente estamos viviendo. Por ejemplo, en el año 2003 el nivel de Guri llegó a su punto más bajo histórico, de 244,55 metros. Sin embargo, no tuvimos esta reacción espasmódica por parte de las autoridades gubernamentales, recordando que eran las mismas que tenemos hoy en día. Otra situación es que desde agosto de 2009, cuando se conoció la presencia de El Niño y los aportes del Caroní estuvieron por debajo de los valores promedio, los caudales turbinados en Guri durante los meses finales de 2009 fueron récord. De esta manera se produjo un gasto excesivo del embalse que condujo a la situación actual. No podemos acusar al consumidor o someterlo a injustas restricciones, como lo hizo el Gobierno para desviar intencionalmente la responsabilidad de quienes debieron tomar las decisiones políticas y técnicas correspondientes. Ellos son: Jorge Giordani (casi 11 años en el gabinete), Alí Rodríguez Araque, Rafael Ramírez (presidente de Pdvsa desde 2003 hasta el presente. Siete años en el gabinete), Diosdado Cabello, Francisco Rangel Gómez (presidente de CVG), José Vicente Rangel, Tobías Nóbrega, Alvaro Silva Calderón y Nervis Villalobos (presidente de Cadafe). Obviamente, todos bajo la jefatura política del presidente Chávez.
¿Qué recomienda?
-El mandatario nacional debería aplicar en toda su extensión la Ley del Sistema Eléctrico aprobada en 1999 y promovida por él mismo. También hay que reprofesionalizar el sector y desmilitarizarlo. El programa de plantas térmicas debe ser gerenciado e implementado por un equipo de experiencia en ejecución. Igualmente es necesario colocar un gran grupo de expertos venezolanos para manejar la actual crisis. Reinstitucionalizar los criterios de planificación en el sector. Además es necesaria la disponibilidad de equipos (85% importado), 12.000 megavatios en los próximos 3 años. Revisar el esquema tarifario a nivel nacional, porque desde hace 8 años no se modifican las tarifas eléctricas. Hay que terminar el proyecto Bajo Caroní y modernizar el parque térmico.
lunes, 17 de mayo de 2010
Un artículo extra.
Manuel Caballero // De archivos y chivatos
El archivo de Bolívar, de la Academia de la Historia al Puente de las Fuerzas Armadas
Que se trasladen los archivos de Bolívar y los de Miranda desde la Academia de la Historia al Archivo General de la Nación, en ninguna parte del mundo provocaría controversia, como no sea en el terreno técnico: que si uno u otro local es el más apto para recibir esos documentos, que si el personal tiene mayor o menor entrenamiento para manejarlos.
Un buen ejemplo de esto se dio en la Escuela de Historia de la UCV siendo Rosalba Méndez directora y Josefina Bernal decanesa de la Facultad: unos seis mil libros donados por la Fundación Lecuna, fueron entregados a la Biblioteca Nacional, donde podían ser mejor ubicados y utilizados. Nadie pretendió hacer una alharaca con un acto normal y corriente ni mucho menos pretender que se estaba descubriendo América o desencadenando una revolución cultural, mucho menos política o social.
Simplemente ridículo
Es por eso que el escándalo armado por el gobierno al quitarle a la Academia Nacional de la Historia el cuidado de esos documentos no es un acto desacostumbrado ni ilegal: simplemente es ridículo. Con el clásico mal gusto militar, se le ha querido dar al acto rutinario de una administración, el carácter heroico de una batalla. ¡Imagínense Uds., arrancar los archivos del Padre de la Patria de manos de esos saporrabúos de oligarcas que los tenían escondidos para que el pueblo no pudiese ver jamás la credencial de miembro del PSUV que el Libertador cargaba en su morral y que sólo mostraba para rematar sus arengas con el consejo tradicional!: (¡Nunca salga sin ella!).
El decreto presidencial y las declaraciones de algunas focas dicen, palabras más palabras menos, eso. En primer lugar, se postula que un bien público como esos archivos no debe estar en manos privadas. De acuerdo, pero lo que estos ignaros no saben es que la Academia no es una institución privada sino pública.
El día de San Simón
Ella fue fundada el 28 de octubre (día de San Simón) de 1888 por Juan Pablo Rojas Paúl, a la sazón Presidente de la República y nunca ha dejado de ser un ente público. Sus archivos, biblioteca y hemeroteca están abiertos al público en horarios normales, en las condiciones que toda institución de ese tipo impone a sus usuarios: por ejemplo, en algunas de los más prestigiosos archivos y bibliotecas del mundo se debe ser, cuando menos, mayor de edad para ingresar allí; y para el manejo de manuscritos antiguos se deben usar guantes y mascarilla, no sólo para proteger esos documentos, sino la salud del usuario.
De modo que esos archivos están a la disposición del pueblo. Pero el problema es que "el pueblo" no siempre está en disposición de consultarlos. Un ejemplo: en la comisión que ha sido enviada a recibir esos archivos, había quienes daban la impresión de que no los hubiesen consultado jamás; que no tuviesen idea de dónde estaban, y que ni siquiera supiesen dónde diablos quedaba la Academia.
Oligarca, ¡temblad!
Hay una persona que, obligatoriamente debía conocer al menos el Archivo del Precursor: tengo entendido que la viceministra Carmen Bohórquez, una de las más vociferantes denunciadoras de esa oligarquía que impedía que "el pueblo" tuviese acceso a los sagrados documentos, escribió un volumen sobre Miranda. Entonces, una de tres: o ella nunca consultó ese archivo, lo cual da una idea de la calidad de ese trabajo suyo; dos, o sí lo hizo, y entonces es una mentirosa de tomo y lomo; o, tres, ella no pertenece al "pueblo" y, por lo tanto es una oligarca (¡temblad!) de uña en el rabo.
Mario Sanoja, obediente a la más mínima voz de mando venida de Fuerte Tiuna, se une al coro: ¡Gloria a Dios en las alturas y en la Tierra al Héroe del Museo Militar, por haber rescatado el archivo del Libertador de las manos de la oligarquía para ponerlo en las del pueblo! Yo creo que los sacrílegos autores del secuestro de esos archivos deberían ser pasados por las armas, comenzando por un tal Mario Sanoja Obediente que, desde hace más de once años, no sólo forma parte de esa corporación oligarca, sino que es hoy mismo su Vicepresidente.
La retórica del traslado
De modo pues que, como se decía al principio, lo grave no es el traslado de unos archivos de un edificio público a otro, sino la retórica que acompaña a ese traslado.
El peligro está en las manos de quienes han de manejarlos, de manipularlos. No nos referimos a algunos pobres diablos que creen que sea "un puesto" lo que les da idoneidad como historiadores, sino al supremo mandamás cuya encadenada y rimbombante retórica copian en todas sus declaraciones: esos archivos, dice, se emplearán para "rescribir" la historia como se debe, o sea, patria socialismo y muerte.
Se dice que el traslado se hará en un acto festivo popular y revolucionario. Imaginamos que allí mismo se entregarán al pueblo esos archivos.
En primer lugar a los gloriosos integrantes de las FACV (Fuerzas Armadas Cubanas de Venezuela, antes FFAANN); y a Lina Ron, a Richard Peñalver, a Darío Vivas y demás desechos sociales. Con lo cual debe entrarle un fresquito a los investigadores: dentro de poco podrán recuperar esos documentos a vil precio bajo el puente de la Avenida de las Fuerzas Armadas.
lunes, 10 de mayo de 2010
EL CONTROL DE CAMBIO
Los venezolanos tenemos que empezar a plantearnos cómo salir de este atolladero y cuáles serán las medidas que habrá que tomar para reconstruir nuestra economía, nuestra sociedad y nuestro país y en este artículo planteamos las razones para por las cuales consideramos que uno de los primeros pasos para iniciar la reconstrucción económica de Venezuela debe ser la eliminación del control de cambio.
El control de cambio se impuso en 2003, y básicamente implica que los ciudadanos o empresas venezolanas no pueden cambiar sus Bolívares a otras monedas libremente, sino que deben hacerlo usando una única vía gubernamental (CADIVI) y sujetos a las regulaciones y procedimientos que este organismo fija.
Pero… Porqué debe desaparecer?
En primer lugar debe desaparecer porque no cumplió con su cometido de detener el flujo de divisas que sale del país. Las divisas siguen saliendo, bien sea por medio del comercio de los bonos emitidos por el estado venezolano, PDVSA y -próximamente- la CVG -quienes colocan de una manera irresponsable bonos en el mercado sin hacer el mínimo cálculo sobre su capacidad futura de pago; el dinero se escapa a través de las fronteras pues miles de ciudadanos tratan de cambiar sus ahorros a pesos, dólares, euros o reales ante el temor a otro "devaluación sorpresa" u otro "madrugonazo" ; el dinero se escapa a través de unas muy dudosas “inversiones” que este gobierno realiza sin ningún orden ni vigilancia en los más diversos países del mundo (Fondo Chino-Venezolano, Fondo Ruso-Venezolano, Fondo Iraní-Venezolano, compra de refinerías e industrias quebradas en el Cono Sur, el Banco del Sur y cientos más. También el dinero escapa en forma de "regalos" (ya ni siquiera disfrazados de inversiones) a Nicaragua, Cuba, Argentina, Uruguay, Bolivia y a cuanto Gobierno le estire la mano y -como si fuera poco- el dinero se escapa en efectivo en maletas que recorren América Latina y el mundo financiando las más disparatadas causas, campañas electorales y Dios sabe qué más. Llama poderosamente la atención que a pesar de tener un control de cambio desde 2003, las reservas internacionales venezolanas siguen sin superar los 30 mil millones de dólares que es mas o menos lo que había al inicio de dicho esquema de control.
En segundo lugar debe desaparecer porque no ha cumplido con su tarea de suministrar divisas preferenciales al sector productivo del país. Por el contrario, se ha convertido en un cuello de botella que ha sumido a nuestros empresarios en la ruina al obligarlos a acudir al dólar paralelo o a endeudarse enormemente con sus proveedores en el exterior. Muchas empresas venezolanas han tenido que cerrar, ir a vacaciones forzosas o tienen serias dificultades pues no obtienen a tiempo las divisas que necesitan para comprar los insumos que requieren para funcionar; un buen ejemplo son las -casi emblemáticas- empresas ensambladoras de vehículos en el centro del país.
El control de cambio debe desaparecer porque se ha convertido en un obstáculo casi insalvable para las personas comunes que desean estudiar o trabajar en el exterior pues viola flagrantemente el derecho de los ciudadanos a gastar el dinero en lo que más les convenga o deseen, pero también se ha convertido en un obstáculo para aquellas personas o empresas que deseen invertir su dinero o enviar remesas al país pues sus euros o dólares se transforman en sal y agua con el cambio oficial. El envío de remesas al país de origen es una parte de la economía muy importante en México, Guatemala, Colombia y en otras regiones del mundo. En Venezuela nos perdemos esa oportunidad, a pesar de tener cerca de un millón de residentes en el exterior.
Por otra parte, el control de cambio se ha transformado en una herramienta de retaliación política. Las personas o empresas que no siguen mansamente los designios del "soberano" son castigadas con la negativa a obtener divisas o en el mejor de los casos con demoras de meses e incluso años de trámites y burocracia interminables. Incluso -en una evidente estrategia para complicar la entrega de divisas- se ha autorizado a los funcionarios de CADIVI a requerir "cualquier documento que se juzgue conveniente para procesar una solicitud", lo cual da un amplísimo margen para obstaculizar -o simplemente negar- el proceso.
Más allá de eso, la asignación de las divisas se hace en base a un esquema de importaciones prioritarias para el país que cercena las libertades económicas y que se basa en una muy dudosa idea de desarrollo nacional. Cosas como libros o papel de impresión -por citar dos casos- no se consideran como bienes "prioritarios para el desarrollo nacional" y por lo tanto no pueden ser importados -a menos que se recurra al mercado negro y por lo tanto su precio se dispare casi al infinito-. Resulta mas que curioso que en una "Revolución socialista" los libros se consideren bienes "no indispensables". Otros ítems como autopartes tampoco reciben trato preferencial impulsando su escasez y el encarecimiento.
Por si fuera poco el control de cambio ha creado un mercado negro de divisas que es totalmente incontrolable y al cual se ven obligados a acudir empresarios y comerciantes que necesitan comprar materias primas o mercancías en el exterior. En este mercado -basado en el miedo, la especulación y la usura- las divisas tienen precios de cuatro o cinco veces el valor que tienen en el mercado oficial lo cual termina reflejándose inevitablemente en los precios que paga el consumidor final.
Además el control de cambio ha creado un enorme campo para la corrupción. Empresarios inescrupulosos se llenan los bolsillos obteniendo dólares preferenciales que luego revenden dentro del país para obtener utilidades cambiarias, los bancos se hacen ricos con los intereses de las tarjetas de crédito que los usuarios se ven obligados a usar para viajar al exterior o con los bonos de la deuda venezolana -que al ser negociados en bolsas de valores en el exterior les permiten obtener dólares a un precio inferior que el paralelo- cuya fecha de emisión solo ellos conocen y por lo tanto solo ellos pueden comprar. Controlar estas operaciones es difícil -por no decir imposible- y los delincuentes de cuello blanco se salen con la suya sin que nada ni nadie los detenga.
Por si fuera poco, la dificultad en la adquisición de divisas -que empuja los precios hacia arriba- y las brutales devaluaciones sorpresa -que empujan los precios aún mas- han creado un círculo inflacionario casi imposible de detener pues la población -que no entiende de las sutilezas económicas pero siente la pérdida de poder adquisitivo- prefiere comprar bienes a ahorrar, lo cual empuja la inflación aún más.
El control de cambio además propicia además el endeudamiento de la población –que busca comprar hoy lo que no podría comprar mañana) pero también atenta contra el ahorro, creando un cóctel peligroso para la estabilidad del sistema financiero.
Finalmente hay que señalar que en Venezuela ya habíamos tenido varias experiencias con el control de cambio y siempre fue necesario desmontarlo debido a su ineficiencia y a los negocios sucios que generaba. Justamente uno de los escándalos mas grandes que vivió la llamada "IV República" fue el de RECADI y parece que la lección no se aprendió.
Se percata del Gobierno Nacional de toda esta situación? Indudablemente que si, pero el tremendo costo que genera a los venezolanos no parece importarles, pues mantener este sistema les permite mantener un férreo control sobre la economía del país y sobre la vida de sus ciudadanos. Cabría preguntarse si incluso este ataque a la economía nacional se hace a propósito con el fin de acabar con la industria privada y hacer a nuetsra gente mas dependiente de las limosnas oficiales.
Lamentablemente, nuestros ciudadanos siguen sin darse por enterados de esta situación, y nuestros jóvenes -a quienes debería importarles aún mas, pues es su futuro el que está en juego- parecen estar interesados solamente en los Blackberries y planear las rumbas vía Facebook o Twitter y no en el collar y el bozal que con mas prisa que pausa se pone a sus vidas.
Qué triste.
JKO
En nuestro próxima entrega continuaremos explorando el tema del control de cambio y en las alternativas para desmontarlo.
sábado, 24 de abril de 2010
El Obelisco del Bicentenario
Esta semana se ha celebrado el Bicentenario de la declaración de la Independencia de Venezuela; el Gobierno Nacional emprendió por ello una campana donde de golpe y porrazo trataron de adecentar la capital en vistas de la visita los amigotes del jefe –que por supuesto no se fueron con las manos vacías- . Dicha campaña incluyó la instalación de un Obelisco de muy dudoso valor arquitectónico -pintado de un furioso color rojo revolución - , la pintura de los brocales de algunas avenidas de un amarillo que no pudo soportar el primer aguacero y un grotesco desfile.
Creemos que Caracas merecía algo mucho más algo tangible y que mejorara un poco sus vidas. Obras como la limpieza del Guaire, la definitiva conversión de La Carlota en un espacio para el disfrute de todos, la ampliación del Parque del Oeste, la nueva autopista Caracas - La Guaira, la finalización del Bus Caracas, un nuevo relleno sanitario que sustituya a La Bonanza, mas vagones para el tren Caracas-Los valles del Tuy, la circunvalación Sur, la terminación de los sistemas de bombeo Tuy 3 y 4, el nuevo cementerio o –sin ir más lejos- darle al Metro el mantenimiento que necesita hubieran sido mejores regalos. Cualquiera de estos proyectos -que han sido anunciados una y otra vez en los últimos 11 anos- hubiera sido mejor que el adefesio rojo que se ha colocado en el centro de la ciudad.
La infraestructura de Caracas se quedó varada en los 80’s mientras que la población ha crecido explosivamente y basta con darse un paseo por el Metro a cualquier hora para constatarlo; no se están haciendo las obras necesarias para garantizar el suministro futuro de agua, gas, electricidad y comunicaciones a la ciudad. Esto es de particular gravedad pues estas obras requieren planeación y tiempo para ejecutarlas –muchas veces años- y eso significa que las carencias que vemos ahora no podrán ser solucionadas en mucho tiempo así que tristemente veremos cómo se harán mas graves y acuciantes. Un ejemplo ilustrará mejor esta idea: Cuánto tiempo cree Ud. que se demorará en construir una vía alterna que despeje las colas de la Francisco Fajardo? O cuánto tiempo se necesita para construir un nuevo embalse que garantice el agua a Caracas? O cuánto tiempo se requiere para limpiar el Guaire?
Pero el problema no es solo la infraestructura. Nuestra capital vive además en un caos permanente, donde solo la ley del más fuerte o la ley del más vivo se respetan ante la mirada impávida y a veces complaciente de las autoridades. Los enjambres de motorizados hacen de las suyas en las autopistas, las drogas se venden abiertamente en todas partes, el cerro el Ávila se ranchifica, los invasores no respetan ningún edificio, las bandas armadas se apoderan de los espacios públicos y la basura se traga todo.
Y por encima de todo está el problema de la inseguridad, el cual no solo nos quita vidas cada día, sino también posibilidades de esparcimiento, de crecimiento económico y de interrelación social pues crea grupos cada vez más cerrados y temerosos los unos de los otros y deja a cientos de familias cada año sumidas en el dolor.
Todo este pandemónium conspira contra la calidad de vida de los caraqueños… pero también contra la economía y contra la salud mental. Una vida marcada por levantarse a las 4 de la mañana para evitar la cola, lidiar con el metro o con la camionetica, el atraco en el jeep, el apagón, el ruleteo hospitalario y la ducha con totuma no es en absoluto el tipo de vida que en pleno siglo XXI los venezolanos merecemos…. O quizás si?
Caracas despide la primera década del siglo XXI –y primera década del gobierno de Hugo Chávez- aquejada de los problemas más diversos – y sin un esfuerzo serio para resolver ninguno de ellos –y lo que es todavía peor en nuestra opinión- con una población que se conforma con vivir en el permanente desastre y el operativo peremne y que parece incapaz de generar una presión ciudadana exigiendo la solución de estos problemas.
lunes, 15 de marzo de 2010
Luego de una larga pausa...
Mucho ha ocurrido en los últimos tres meses; nos hemos bamboleado entre amenazas de guerra con Colombia, crisis bancaria, expropiaciones caprichosas, devaluación del Bolívar fuerte, crisis eléctrica, nueva ola de invasiones y muchas otras cosas mas. Lamentablemente cada una de estos nuevos ingredientes no hace sino empeorar una situación que ya de por si era muy mala.
Ahora, en un nuevo paso -que a estas alturas no debería sorprender a nadie- el Gobierno Nacional carga contra el internet. En próxima shoras comentaremos al respecto.
viernes, 25 de diciembre de 2009
EL SHOW EN COPENHAGEN
Nos impresiona en primer lugar su falta de ética, al utilizar -junto con los otros gobernantes del ALBA- esa importante ocasión para publicitarse como líder anti-imperialista mundial y no para asumir un papel constructivo y ayudar a buscar una solución al enorme problema al que se enfrenta la humanidad.
Buena parte de sus discursos no fueron más que el eterno sonsonete de “Estados Unidos tiene la culpa de todo” que durante décadas ha caracterizado a algunos gobiernos irresponsables de América Latina, quienes usan ese discurso para distraer la atención sobre las verdaderas responsabilidades de las penurias que afrontan los habitantes de la región. Muy lamentablemente ese discurso sigue teniendo éxito, no solo en América Latina sino con la desinformada izquierda europea y con un gran número de grupos de aprovechados activistas de mil banderas. El caso es que este discurso –que puede sonar muy bonito a algunos- no tenía nada que ver con lo que se discutía allí y solo sirvió para agitar el ambiente y crear más diferencias de las que ya había al iniciar la conferencia.
En medio de su retórica -totalmente contradictoria y fuera de lugar- además afirmó que solo firmaría un acuerdo basado en el Protocolo de Kioto. Vale la pena destacar que Venezuela se adhirió al protocolo de Kioto en 2004 -que además fue ratificado por la Asamblea Nacional en 2005, lo cual le da rango constitucional- y sin embargo, 5 anos después no lo hemos cumplido. De hecho, hemos hecho todo lo contrario.
El Protocolo de Kioto señala que para 2012 los países signatarios deben reducir sus emisiones de gases que causan el efecto invernadero a un 5% por debajo de los niveles que emitían en 1990. Entre 1992 y 2007, Venezuela aumentó sus emisiones de gases que causan el efecto invernadero en 53.65% y ni siquiera hay datos de la situación actual. Entonces... cómo puede Hugo Chávez pretender imponer al mundo algo, que su gobierno prometió cumplir y no ha cumplió?
Cierto es que Estados Unidos es uno de los más grandes contaminantes del globo, pero no es el más grande. El mayor productor de gases que causan el efecto invernadero es China y sobre esto el paladín global no mencionó ni una palabra. Tampoco criticó el hecho de que Brasil se negara a firmar el acuerdo con la excusa de que China no lo había firmado, y tampoco señaló que algunos países capitalistas y desarrollados como Alemania, Francia, el Reino Unido y la anfitriona Dinamarca si han cumplido –y algunos de ellos sobrepasado- las metas de Kioto.
No contento con esto, el Presidente hizo noticia al transformarse en el defensor de los activistas que protestaban en las calles de la capital de Dinamarca. Incluso –con un cinismo escandaloso- llegó a decir que represiones como la vista allí no eran vistas en Venezuela. Lo dice el mismo individuo que meses antes ordenaba arrojar "gas del bueno" contra los estudiantes universitarios de su propio país, que ha ordenado la creación de grupos armados para aterrorizar a la población que se le opone y de quien hay evidencia de que ordenó aplicar el Plan Ávila en abril de 2002.
Incluso -en su loca búsqueda de espacio en los periódicos y en un arrebato de arrogancia que demuestra que poco queda del muchacho que vagaba descalzo por Sabaneta- encaró burlonamente al personal de seguridad que le pedía que le permitiera usar la sala a otros jefes de estado que también necesitaban dar ruedas de prensa.
Finalmente, mientras los líderes del mundo cenaban y trataban de sentar las bases de un acuerdo, el paladín de los oprimidos del mundo se dedicaba a juguetear en la nieve con su leal y buen amigo –y gran beneficiario del dinero venezolano- Evo Morales, quién –por cierto- también hizo un papel lamentable en ese evento.
Cierto es que el acuerdo de Copenhague no es vinculante y está muy lejano a lo que se necesita. Pero es algo, y es mejor que nada. Incluso el Presidente de Maldivas -cuyo país simplemente desaparecerá del mapa en una década de continuar las tendencias actuales de aumento del nivel del mar- lo vio de esa manera. Negarse a firmar el acuerdo -que no pasa de ser una declaración de intenciones- es una muestra de total falta de solidaridad con el mundo entero.
Aunque no hay manera de saberlo con certeza, muchos expertos pronostican que Venezuela se verá tremendamente afectada por el calentamiento global. Los cambios en los patrones de las lluvias afectarían nuestra agricultura, nuestro suministro de agua potable y nuestra producción eléctrica -por citar solo tres cosas de vital importancia-, temporadas de huracanes más largas y violentas podrían golpear nuestros litorales -en donde se concentra la mayor parte de la población del país- , el aumento del nivel del mar podría hacer desaparecer a la costa Oriental del Lago de Maracaibo, al Delta del Orinoco y transformaría Paraguaná en una isla, Margarita podría quedar dividida en dos al inundarse la zona de la Restinga, el delicado equilibrio de salinidad del Lago de Maracaibo se afectaría al entrar más agua salada en su fosa -acabando con toda la economía basada en la pesca de la zona- y aumentos en el nivel del Río Orinoco podrían inundar bastas zonas de nuestro Llano. Además, el aumento en la temperatura del agua del Caribe podría acabar con los corales y hacer migrar a los bancos de peces a zonas más lejanas. Aparte de esto, uno o dos grados más de temperatura serán suficientes para que el dengue y el paludismo puedan llegar al último rincón del país e incluso nuestra Gran Sabana podría convertirse en un árido desierto. A nuestro modo de ver, esto es más que suficiente como para no tomarse el calentamiento global a broma –como evidentemente Chávez se lo toma-.
Hace pocos años, nuestro Presidente mencionó que nuestros líderes iban de cumbre en cumbre y nuestros pueblos de abismo en abismo. Hoy en día, él mismo no se pela una cumbre y en cada una de ellas se transforma en noticia. En este caso, lamentablemente, fue más allá, y su falta de seriedad nos ha llevado a nosotros –y al mundo entero- aún más cerca de una tragedia de proporciones inimaginables.
viernes, 18 de diciembre de 2009
Basura, basura y mas basura
Esta situación no puede seguir así. En pleno siglo XXI, ciudades anteriormente conocidas por su suciedad como Barcelona, Atenas, Lima o la Ciudad de México han logrado superar este problema y nosotros seguimos varados en el mismo punto que hace veinte anos... o incluso en peores condiciones. Este problema debe ser resuelto, y debe ser resuelto pronto. No solamente por razones de mera estética, sino por razones de salud pública.
Aquí trataremos de proponer algunas medidas para mejorar esta situación; sin embargo debemos senalar que dichas medidas aplicadas de forma aislada y sin interconexión no son suficientes para resolver el problema y que no pasarían de ser "panitos de agua tibia". Las medidas deben ser aplicadas como un todo y de manera que unas complementes a las otras.
Para empezar existe una manera de reducir la cantidad de basura -y además obtener dinero- y es mediante el reciclaje. Las municipalidades pueden colocar containers separados -de colores diferentes- en algunos sectores de las ciudades de manera que la gente separe los desperdicios por si misma (vidrio, papel y cartón, metales, plásticos). Esto permite reducir la cantidad de desperdicios que van al relleno sanitario, ayuda al medio ambiente al reutilizar recursos y permite obtener dinero por la venta de estos materiales -que además no han costado nada, por lo que es el negocio perfecto- . Además tendría beneficios políticos importantes para lo alcaldes que lo pongan en marcha. A qué político no gustría ser tachado de "protector del medio ambiente"? Increiblemente, algo tan simple como esto (y que podría auto-financiarse e incluso generar algunos recursos extra para una municipalidad) no ha sido puesto en marcha.
Aparte de esto, las rutas de recogida de desperdicios deben ser planeadas mejor. Lamentablemente las empresas que se encargan de la recogida de los desechos usan parámetros propios de países con otros patrones climáticos sin tomar en cuenta que lo que en Suecia demora tres días en descomponerse, bajo el sol y la humedad venezolana demora uno. Evidentemente en áreas comerciales se requiere recoger la basura mas que dos veces a la semana y además, los usuarios deben depositar la basura en puntos específicos y no frente a sus casas o negocios. Solamente en nuestras ciudades se ven restaurantes de lujo con cerros de bolsas de basura en la entrada y eso no puede continuar. Los usuarios deben colocar la basura en puntos específicos establecidos con anterioridad so pena de multas -que las municipalidades están autorizadas a emitir y a cobrar- Esto permitirá que los camiones de basura puedan hacer recorridos mas rápidos, atacando puntos concretos, sin obstaculizar el tránsito.
En pleno siglo XXI nos sorprende que las brigadas de limpieza en nuestras ciudades no posean equipos para limpiar los espacios urbanos de una manera rápida y eficiente. Existen cientos de companías en el mundo que venden dichos equipos -cuyo manejo no es complicado- Usarlos permitiría mantener limpios espacios mas grandes con el mismo personal. Incluso existen algunos equipos que usan chorros de agua y jabón, cosa que no le caería nada mal a la Avenida Urdaneta.
En muchas ciudades existe un día en particular en el que se recogen muebles y corotos viejos. Esto sería particularmente útil en nuestras ciudades donde no hay quebrada, cano, alcantarilla o río que no tenga varios colchones flotando en su cauce.
Además, tendremos que hacer una tremenda campana de educación y de información. En Venezuela sabemos hacer eso... y lo hacemos muy bien. Las campanas en la década de los '80's sobre cómo debían comportarse los usuarios en el Metro de Caracas no solamente fueron un éxito, sino que fueron copiadas en todo el mundo.
Por otra parte, cada municipio debería tener una estación de transferencia, cercana al núcleo urbano mas importante, donde los camiones de basura puedan depositar su carga. De esta manera se puede usar el mismo camión para mas viajes en menos tiempo (pues el camión no debe viajar a un remoto botadero de basura). Desde estas estaciones, la basura puede ser trasladada durante las noches (para no obstaculizar el tránsito) mediante camiones mas grandes y resistentes o en un futuro mediante vías férreas. Esta estación de transferencia puede servir tambien para depositar el material a reciclar -que luego será vendido- y para medir y controlar la cantidad y procedencia de los desechos, información que servirá para mejorar el sistema de recolección. También serviría para separar materiales peligrosos para enviarlos a sitios donde se pueda disponer de ellos de forma segura. Hay que senalar que una estación de transferencia no es un botadero secundario, es una instalación industrial, techada y donde se realiza una labor de separación, clasificación y recabado de información de los desechos que genera una ciudad.
Siguendo con la cadena, nos encontramos que en nuestro país no existe ni un solo relleno sanitario que cumpla con las normas internacionales mínimas. En cada una de nuestras ciudades el problema es el mismo, desde Lagunillas en Mérida hasta la Bonanza en Caracas. Es urgente que en cada municipio o grupo de municipios cercanos se hagan los estudios necesarios para encontrar un sitio con las condiciones geológicas necesarias para instalar un relleno sanitario que cumpla con las normas internacionales y que permita una vida útil de 15 o 20 anos, así como los proyectos relacionados con los detalles estructurales y de operación del relleno, el uso de los gases que generará y el uso final que se le dará una vez que deje de funcionar.
Un relleno sanitario no es simplemente un hueco donde se arroja la basura. Es una instalación que debe tener un tamano suficiente para funcionar durante un período muy largo -pues la inversión que se requiere es alta y solo es factible hacerlo si resuelve el problema por un período de tiempo lo duficientemente largo-, por ello, debe ser un sitio geológicamente estable y con niveles freáticos profundos para evitar que se inunde; además debe ser construido de manera tal que pueda desarrollarse por etapas. Los desechos se disponen sobre capas de materiales impermeables y los líquidos que se generan por la descomposición de la basura pueden ser conducidos y tratados antes de llegar a las corrientes de agua, también se insertan tuberías para conducir los gases que se forman y evitar las explosiones e incendios tan comunes en nuestros botaderos de basura. Por otra parte el acceso a estas instalaciones es restringido para evitar el robo de maquinaria y las invasiones.
Con el transcurrir del tiempo, se llegará al final de la vida útil del relleno y este tendrá que ser clausurado, pero si este se ha disenado bien, podrá ser transformado en un área recreacional con una mínima inversión. Las opciones son muchas y van desde parques y bosques hasta instalaciones deportivas.
Es cierto que lo descrito arriba cuesta mucho dinero, pero las inversiones pueden ser compartidas por varios municipios, el Ministerio del ambiente y los gobiernos estadales y nacional. Además, ciertas etapas del proceso podrían generar ingresos -como el reciclaje-; además, siendo Venezuela un país que subsidia generosamente la Revolución continental, que financia referendums fraudulentos en Honduras, tiende cables de fibra óptica que cruzan todo el Caribe para comunicar a Cuba con el mundo y construye refinerías para dar trabajo a los brasilenos, el dinero no debería ser un problema.
Estas inversiones permitirían mejorar las condiciones sanitarias de millones de personas, ayudaría a preservar el medio ambiente, a reducir las cantidades de desperdicios que van a nuestros ríos, crearían empleos e incluso -en algunas condiciones- podrían ser sustentables económicamente. La solución no es sencilla, ni habrá resultados de un día a otro, pero si no empezamos pronto, seremos devorados por la basura... o por las ratas que viven en ella.