lunes, 12 de julio de 2010

Algo mas sobre el servicio eléctrico.

Publicamos esta nota que contiene algunos datos interesantes sobre el sistema eléctrico venezolano.



Recuperar Planta Centro no solucionará crisis porque ya cumplió su ciclo de vidaMarlene Castellanos* / Notitarde (Venezuela) - 16/05/10

Miguel José Lara: Los recursos que fueron utilizados para la compra de armas a Rusia podrían haberse invertido en los 7 mil megavatios que necesita el país para salir de la actual situación eléctrica.Laurentzi Odriozola, director de este diario; María Inés Ferrero, gerente de Relaciones Institucionales; Margarita Jiménez Márquez, representante de la Junta Directiva del rotativo; Miguel José Lara; Glenda González; Marlene Castellanos y Alejandrina Uribe-Betancourt, editora jefa diurna.
Las constantes fallas en el complejo de generación de energía de Planta Centro, y la suspensión de sus operaciones por daños sufridos en sus unidades, hacen pensar al ex director del Centro Nacional de Gestión del Sistema Eléctrico Nacional, Miguel José Lara, que seguir invirtiendo recursos en esta termoeléctrica no es una solución. Lara señaló que el nivel de deterioro de la infraestructura es de tal magnitud que recuperarla sería invertir dinero que no se justifica. "Si se hace, no sería lo más recomendable para el sistema eléctrico". Planta Centro no está aportando actualmente ni siquiera el 50% de su potencial, pues esta infraestructura generaba antes 2 mil megavatios para el servicio energético del país, y ahora sólo 460. Esta termoeléctrica, según Lara, recibió durante los últimos 10 años más de 200 millones de dólares asignados por presupuesto, recursos que no se ven, pues actualmente hay menos unidades en servicio. Igualmente comentó que la quema del transformador develó que existe una problemática grave dentro de las instalaciones, pues no se contó con una fase de repuesto en el sitio, que permitiera en menos de 24 horas reponer el servicio. Lara, quien estuvo en el Desayuno en la Redacción para comentar del informe sobre "La crisis eléctrica, una tragedia que une a los venezolanos", dijo a Laurentzi Odriozola, director de este diario; Margarita Jiménez Márquez, representante de la Junta Directiva del rotativo; María Inés Ferrero, gerente de Relaciones Institucionales; Alejandrina Uribe-Betancourt, editora jefa diurna, y a quien escribe estas líneas, que las calderas de Planta Centro no sirven y además no cuentan con la capacidad suficiente para el generador. El experto recomendó al Gobierno edificar una instalación nueva y más eficiente con todos los equipos, porque los que existen en la termoeléctrica ya cumplieron su vida útil. "Con una buena gerencia este proceso se llevará entre dos y tres años, siempre y cuando se consigan las turbinas con disposición inmediata". Lara dijo no entender por qué el Gobierno insiste en recuperar Planta Centro con la asesoría de los cubanos. "Esta decisión genera suspicacia, pues podría pensarse que hay una desviación de recursos, porque de las cinco turbinas, sólo funciona parcialmente la 4 y actualmente una tercera (la 1) está en recuperación, como ha registrado la prensa".
El país necesita 7 mil megavatios
-Venezuela requiere 7 mil megavatios. Si calculamos cada uno en 700 mil dólares, con los 5 mil millones de dólares que utilizará el Gobierno para comprar las armas a Rusia, se pudo haber generado la cantidad de megavatios que se necesitan. Esta cifra permitiría resolver el problema de generación eléctrica del país y algunas obras. Hasta el día de hoy sigue existiendo un déficit para suplir la demanda, el sistema nacional cubre desde finales de los años 80 más del 97% de toda la población. Para finales de 2009, la generación está compuesta por un parque hidráulico que tiene una capacidad instalada de 14 mil 630 megavatios y un parque térmico con una capacidad instalada de 9 mil 40 megavatios aproximadamente. Todo, para un total de unos 23 mil 670 megavatios. Venezuela cierra el año pasado con un consumo de energía de 123.000 gigavatios/hora y una demanda máxima histórica de 17.300 megavatios. Los planificadores estiman un incremento de dicho consumo con un promedio ínteranual de 4,25% en los últimos 10 años. La actual administración, que lleva ya 11 años, ha debido planificar para tener una generación superior al 55% de la identificada en 1998. Sabemos que en cuestión de días el embalse comenzará a recuperarse, pero así inicien las lluvias no se podrá restablecer el servicio en su totalidad.Es bueno explicar que, como todos los años a mediados de mayo, los aportes del río Caroní suben, pero lo recomendable en estos momentos es que se mantengan los cortes programados un tiempo más, mientras que el Guri se restablece. Suspender el racionamiento le corresponderá al Gobierno, pero sabemos que el escenario lo determinarán los próximos cuatro meses que vienen; fue por ello que el ministro Alí Rodríguez Araque habló de seis meses, pero el Presidente de la República dijo que el decreto de emergencia se extendería sólo por 60 días. Expertos señalan que debemos sacar del sistema una demanda cercana a los 1.600 megavatios/hora promedio, para evitar un mal mayor y una situación de crisis nacional.
¿Cómo hacer?
-Allí está el dilema, al corto plazo lo correcto es hablar de que los racionamientos se incrementarán y que se harán más frecuentes. La población estará más restringida de usar este servicio público que nunca antes. Es irresponsable señalar fechas precisas del colapso del sistema hidroeléctrico de Guayana, al menos hasta este momento. Pero sí se puede afirmar que a partir de mayo la situación del sistema hidroeléctrico de Bajo Caroní estará muy comprometida. El Guri en 2009 se deterioró casi como si se hubiese presentado dos años secos seguidos, porque se hizo un uso intensivo y se gastó mucha más agua de la que correspondía para un primer ciclo. Tenemos una situación desde el punto de vista del manejo de la represa que hace prever para 2011 un año crítico, si no se mantienen las medidas aplicadas hasta ahora, porque se deteriorará más el embalse podría llegar a la denominada cota crítica de 240. El Guri tiene 20 turbinas que fueron construidas en tres etapas: 1968 a 1976; después de allí se incorporaron equipos de 670 megavatios. Aun cuando el Gobierno reporta una capacidad instalada cercana a los 24 mil megavatios, está ofreciendo sólo 16 mil 500. Esto significa que el embalse no se recuperará este año porque hay un déficit de 8 mil gigavatios hora. Nosotros dijimos el año pasado que en 2010 no llegaríamos a la cota de colapso, pero advertimos que en 2011 se iban a presentar dificultades, si no se tomaban las previsiones del caso. Ahora bien, el sistema hidroeléctrico nacional representa una de las obras de ingeniería más imponentes del continente. Las represas de Guri I y II (8.850 megavatios), Macagua I, II y III (2.930 megavatios) y Caruachi (2.196 megavatios) representan una generación eléctrica de aproximadamente 14.000 megavatios, un 80% de lo que demanda el país en condiciones normales. A este sistema se le sumará en 2014 la central Tocoma, ubicada entre Guri y Caruachi, con 2.270 megavatios. La generación hidroeléctrica en el Bajo Caroní nos significa un volumen de energía en el orden de 550 mil barriles equivalentes de petróleo diarios, energía fósil (gas, diesel, residuales) que por defecto no quemaríamos en centrales termoeléctricas. Las otras fuentes de energía hidroeléctrica son: Central San Agatón, en Táchira (300 megavatios), Central José Antonio Páez, en Mérida (240 megavatios), Central Juan Antonio Rodríguez, en Barinas (80 megavatios), y Central Masparro, ubicada también en Barinas (25 megavatios). Próximamente, se pondrá en servicio La Vueltosa, ahora llamada Fabricio Ojeda, en Táchira (514 megavatios).
¿Se redujo el consumo con las medidas aplicadas?
-El aporte más importante se dio con el racionamiento a las industrias básicas, pues la demanda de Edelca se redujo casi en un 30%. Las acciones de Cadafe no fueron efectivas porque las cifras demuestran que no hubo una disminución. La explicación es que no posee medidores, por lo que no se pudo hacer un seguimiento. Esta última empresa tiene un déficit de medición que excede del 70% de los usuarios; esto hace que se determine que el resto de las acciones aplicadas por el Ejecutivo no fueron efectivas. Las asesorías que hemos tenido hasta el momento no han solventado el problema eléctrico; el país lo que requiere son obras. Nadie sabe dónde están los 50 mil millones de dólares que recibió el Ejecutivo a través de las asignaciones presupuestarias por la Asamblea Nacional, tarifas, ventas reportadas, Fonden y Rusia. El Gobierno dijo que iba a instalar 5 mil 800 megavatios, pero esta cifra ha entrado en su lista de deseos, porque su intención de concretar obras es escasa. Además hay mucha militarización y estos efectivos no están capacitados para esta área. En las plantas se han ido sustituyendo los ingenieros formados por personas que son afectas al proceso del Gobierno, las cuales son colocadas allí sólo para vigilar.
¿Qué no hizo el Gobierno?
-El Gobierno Nacional durante estos últimos 11 años no ejecutó obras que incrementaran la generación eléctrica a un promedio ínteranual de 1.200 megavatios. Además no inició la construcción de la planta eléctrica Termo Bachaquero (1.000 MW), ubicada en la costa oriental del lago, estado Zulia, la cual debió estar lista en 2008. El Gobierno instaló la planta Pedro Camejo, en Valencia, pero produce sólo 150 megavatios, el 50% de su capacidad (300 megavatios), por razones de combustible y transmisión asociada. La planta termoeléctrica Josefa Camejo, en Punto Fijo, de 450 megavatios, sólo opera una tercera parte de su capacidad. La presa de Tocoma, en el estado Bolívar, tiene siete años de retraso y se planteó que esté terminada en 2014. Igualmente están retardadas la presa La Vueltosa, en Mérida, y la de Masparro, en el estado Barinas. El Gobierno tampoco recuperó el parque turbo gas que administraba Cadafe, bajo el ensayo institucional hoy denominado Corpoelec. Otra realidad grave y ventilada es que durante estos 11 años no se han construido ampliaciones significativas de la red troncal. Lo que sí se puede afirmar con absoluta seguridad es que en estos 7 últimos años no se ha edificado ni un solo kilómetro de la red troncal. Este sistema funciona actualmente por encima de sus límites normales de operación. Corpoelec ha construido sólo 155 kilómetros de líneas de transmisión, cuando debió haber culminado 642 kilómetros, según sus propios informes. Cadafe perdió cerca del 75% de su electricidad por robos en baja tensión, mala facturación y por no cobrar. La demanda nacional se incrementó cerca del 60%. Eso representa unos 6.500 megavatios nuevos, pero sólo se pusieron en servicio 4.000 megavatios que no están operativos en su totalidad. Lo que sí se puede afirmar categórica y responsablemente es que a la administración del presidente Chávez nunca le han faltado piso legal, político y dinero para haber adecuado apropiadamente la infraestructura del sector eléctrico. Lo único que le ha faltado son ganas para trabajar y tener las obras funcionando debidamente. El Ejecutivo culminó Caruachi, la cual se encontraba en un 25% adelantada; la OAM, en el Distrito Capital (82% avanzada); la Josefa Camejo, Pedro Camejo, Argimiro Gabaldón, Termo Zulia I y la primera etapa de Termo Zulia II; además también concluyó Termo Barrancas, Masparro. En su mayoría, los proyectos ejecutados exhiben características deficitarias.
¿Cómo era el Centro Nacional de Gestión del Sistema Eléctrico?
-Cuando estuve allí, nosotros hacíamos planes que tenían un alcance de 20 años y se le entregaban los estudios al Gobierno. El documento establecía los requerimientos de la demanda y cuáles eran las obras que se requerían. Pero el Ejecutivo cambió la metodología y dijo que iba a impulsar la orimulsión. Posteriormente nombró una comisión de alto nivel para evaluar el sistema y se planteó que por nada en el mundo se iba a aplicar un racionamiento. En 1999 el Gobierno aceptó que iba a rehabilitar Planta Centro, un parque de turbo gas de Cadafe. En esa fecha Pdvsa asumió las labores de hacer la expansión del sistema eléctrico. La Electricidad de Caracas ya tenía una licitación para una planta que se llama El Sitio, que tenía un ciclo combinado. En 2001 se presentó el primer año seco y el Ejecutivo se planteó que en 2013 debería haber 41 mil gigavatios hora, pero nada de esto lo tenemos hoy día. Existen los respectivos informes, presentaciones y correspondencias, dirigidos directamente a la Vicepresidencia de la República y a los ministros de Cordiplan, de Energía y Minas en 2001, 2002 y 2003, en los cuales se señalan los correspondientes pronósticos. Posteriormente el Ejecutivo en el año 2005 formula el Plan de Desarrollo del Sector Eléctrico Nacional (Pdsen), que precisa muy claramente los alcances y características de las inversiones y obras a realizar, pero se ejecuta en un porcentaje muy bajo. Complementariamente, en el marco de la primera Ley Habilitante otorgada al presidente Hugo Chávez en 1999, se aprueba la primera Ley de Servicio Eléctrico en 110 años de la industria eléctrica en Venezuela, que de haberse cumplido no estaríamos en la actual coyuntura.
¿Es verdad que la culpa es de El Niño?
-El fenómeno de El Niño ha ocurrido 24 veces en toda la historia de registros de aportes del Caroní, la cual se lleva desde 1950. En los 11 años de esta administración, se ha presentado cuatro veces (2002, 2004, 2006 y 2009) y en las tres primeras oportunidades el Caroní entregó aportes al embalse del Guri superiores al promedio histórico. Incluso, en los años 82-83 y 97-98 su presencia fue más extrema que en la actualidad, y no tuvimos necesidad de padecer lo que actualmente estamos viviendo. Por ejemplo, en el año 2003 el nivel de Guri llegó a su punto más bajo histórico, de 244,55 metros. Sin embargo, no tuvimos esta reacción espasmódica por parte de las autoridades gubernamentales, recordando que eran las mismas que tenemos hoy en día. Otra situación es que desde agosto de 2009, cuando se conoció la presencia de El Niño y los aportes del Caroní estuvieron por debajo de los valores promedio, los caudales turbinados en Guri durante los meses finales de 2009 fueron récord. De esta manera se produjo un gasto excesivo del embalse que condujo a la situación actual. No podemos acusar al consumidor o someterlo a injustas restricciones, como lo hizo el Gobierno para desviar intencionalmente la responsabilidad de quienes debieron tomar las decisiones políticas y técnicas correspondientes. Ellos son: Jorge Giordani (casi 11 años en el gabinete), Alí Rodríguez Araque, Rafael Ramírez (presidente de Pdvsa desde 2003 hasta el presente. Siete años en el gabinete), Diosdado Cabello, Francisco Rangel Gómez (presidente de CVG), José Vicente Rangel, Tobías Nóbrega, Alvaro Silva Calderón y Nervis Villalobos (presidente de Cadafe). Obviamente, todos bajo la jefatura política del presidente Chávez.
¿Qué recomienda?
-El mandatario nacional debería aplicar en toda su extensión la Ley del Sistema Eléctrico aprobada en 1999 y promovida por él mismo. También hay que reprofesionalizar el sector y desmilitarizarlo. El programa de plantas térmicas debe ser gerenciado e implementado por un equipo de experiencia en ejecución. Igualmente es necesario colocar un gran grupo de expertos venezolanos para manejar la actual crisis. Reinstitucionalizar los criterios de planificación en el sector. Además es necesaria la disponibilidad de equipos (85% importado), 12.000 megavatios en los próximos 3 años. Revisar el esquema tarifario a nivel nacional, porque desde hace 8 años no se modifican las tarifas eléctricas. Hay que terminar el proyecto Bajo Caroní y modernizar el parque térmico.